Reflexiones contra la religión

En Reflexiones contra la religión Mark Twain nos hace entender que Dios es fuente de toda misericordia, pero asi mismo el autor da cuenta que no hay un solo caso auténtico en la historia en la que Dios haya mostrada esa virtud. Decimos que es fuente de toda moral, pero sabemos por Su historia y por Su conducta diaria que Él no tiene absolutamente nada que se parezca a la moral.

En El bombre que corrompió una ciudad la codicia, elegoísmo y la avaricia se estigmatizan. Forma y contenido se funden perfectamente al servicio de la sátira más cruda, sostenida por una trama esencial que se basa en un mecanismo narrativo perfectamente construido